El pasado 15, 16 y 18 de febrero, en el marco de la celebración de los Día de la Ciencia en las secciones de primaria, bachillerato y preescolar, los estudiantes del Colegio La Colina se unieron con el Programa Gran Cuenca del Río Teusacá para la restauración e investigación del bosque del colegio.
Por medio de las actividades realizadas, no solo contribuyeron a la restauración del ecosistema del bosque altoandino, sino que pusieron en práctica sus habilidades para la investigación científica, logrando generar nuevo conocimiento útil para la toma de decisiones en torno a la sostenibilidad de la cuenca en materia de residuos sólidos, calidad del agua y la biodiversidad.
Dentro de las actividades desarrolladas, los estudiantes de las tres secciones plantaron 40 árboles nativos del bosque altoandino en diferentes espacios del colegio y establecieron un semillero con potencial para 1000 árboles nativos (Lupinus bogotensis y Lupinus mutabilis) que estarán destinados a la reforestación de diferentes sectores de la Cuenca del río Teusacá.
Por otro lado, las actividades de investigación científica en bachillerato incluyeron el monitoreo de la calidad del agua de las quebradas que recorren el bosque del colegio y de los vertimientos al río Teusacá, desde la medición de parámetros físico-químicos y la recolección e identificación de macroinvertebrados como bioindicadores.
En términos de biodiversidad y relaciones ecosistémicas, se realizó la marcación en campo y se levantó el mapa de ubicación de las especies vegetales invasoras “retamo espinoso” (Ulex europaeus) y “ojo de poeta” (Thumbergia alata), la especie colonizadora “bejuco colorado” (Muehlenbeckia sp) y el árbol emblemático “rodamonte” (Escallonia myrtilloides) presentes en el bosque del colegio. En esta misma línea, el aporte investigativo de los estudiantes de primaria y preescolar se tradujo en registros gráficos del material vegetal del bosque a través de la clasificación de hojas recolectadas según rasgos taxonómicos básicos.
En materia de residuos sólidos, estudiantes de bachillerato realizaron un ejercicio de caracterización de las basuras generados en el comedor y en algunos salones, lo cual facilitó la reflexión en torno al consumo responsable y la disposición adecuada de los residuos.
Como complemento a las actividades mencionadas, se realizaron ejercicios de sensibilización sobre servicios ecosistémicos, gestión de residuos sólidos y problemas ambientales mediante diferentes estrategias como juegos, cine foros y conferencias.
De este forma, el colegio no solo se unió a una red local de monitoreo y conservación de los ecosistemas, sino que fortaleció las habilidades de investigación científica y fortaleció su tejido social interno en beneficio del ambiente.